martes, 18 de noviembre de 2008

Buscan que controle EMP vuelos oficiales


Alberto Morales
El Universal
Martes 18 de noviembre de 2008

alberto.morales@eluniversal.com.mx

Luego de la tragedia en la que murió el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, y 13 personas más, autoridades y expertos plantean la necesidad de que pilotos de la Fuerza Aérea Méxicana (FAM), bajo órdenes del Estado Mayor Presidencial (EMP), sean los que tripulen los viajes de todos los funcionarios públicos y no sólo los del Presidente.

El reglamento del EMP establece que corresponde al Estado Mayor “proporcionar el servicio de transporte aéreo del Presidente, así como de los servidores públicos y personalidades que determine el propio mandatario”.

El piloto que tripulaba el jet de Mouriño era comercial.

Jorge Luis Sierra, especialista en temas de Seguridad, señaló que el Estado Mayor debió garantizar que cualquier persona que tripulara el LearJet 45 tuviera todos los conocimientos necesarios para cumplir con su labor de forma adecuada.

Lo que no ocurrió el pasado 4 de noviembre, de acuerdo con las primeras indagaciones y principales líneas de investigación, cuando se desplomó el avión en el que murieron el secretario de Gobernación Juan Camilo Mouriño, el fiscal José Luis Santiago Vasconcelos y 12 personas más, en las Lomas de Chapultepec.

José Carreño Carlón, quien fuera vocero del ex presidente Carlos Salinas, precisó que “lo ideal sería que el servicio lo prestará un cuerpo del Estado Mayor Presidencial, con la garantía de contar con personal más capacitado y disciplinado para cumplir los protocolos”

Subrayó que en su paso por Los Pinos no conoció que los aviones fueran tripulados por pilotos comerciales —como en el caso de la tragedia de las Lomas—, sino por personal de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM).

Luis Téllez, titular de Comunicaciones y Transportes, señaló que no hay un “código de procedimientos de seguridad” que establezca que altos funcionarios tengan que volar con pilotos de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), sólo el Presidente goza de esa disposición.

En entrevista con Denise Maerker, Téllez Kuenzler dijo que el Ejecutivo usa aviones y helicópteros del EMP, piloteados por altos mandos de la Fuerza Aérea Mexicana, disciplinados y con amplia experiencia.

“Esto se tiene que ampliar a todos los funcionarios públicos. Desgraciadamente esto tendrá que suceder después de que murieron 14 gentes (sic). Lo tengo que decir, lo tenemos que hacer, en eso trabajamos”, apuntó.

En Presidencia señalaron que la responsabilidad de la seguridad física de funcionarios de alto nivel, como el titular de Gobernación, es tarea del EMP, pero las herramientas con las que se proporciona son responsabilidad del órgano interno de cada dependencia.

Junto con Mouriño falleció el capitán de caballería Julio César Ramírez Dávalos, encargado de garantizar la seguridad física del funcionario. Las herramientas para el transporte del secretario corren a cargo de la dependencia, dijo una fuente del gobierno federal.

El senador y ex subsecretario de Gobernación, Felipe González (PAN), coincidió con Luis Téllez en que es necesario revisar los protocolos de seguridad en todas las áreas. Sobre si el EMP debió pilotear la nave de los funcionarios, dijo tajante que no.

El titular de la Comisión de Seguridad Pública de la Cámara de Diputados, Francisco Rivera (PRI), dijo que los secretarios no militares deben tener servicios de transporte aéreo civil.

El general retirado Luis Garfias consideró que de haber enviado a militares a la nave de Mouriño no se habría garantizado que se librara de incidentes o accidentes.



Jorge Luis Sierra agregó: “Si hubo una falla en el entrenamiento o en la certificación de los pilotos, es en realidad una falta de cumplimiento de labores del Estado Mayor”.

Otra de las criticas del especialista es que el secretario viajara junto con el ex zar antidrogas José Luis Santiago Vasconcelos.

Refirió que en Estados Unidos, los protocolos de seguridad evitan que funcionarios importantes estén o viajen juntos. “Nunca vimos al presidente Bush y al vicepresidente en el mismo lugar después de los atentados del 11 de septiembre de 2001”, acotó. (Con información de Sergio Javier Jiménez, Ricardo Gómez y Juan Arvizu y Jorge Medellín)

Crimen se coló al Estado


Alberto Morales
El Universal
Martes 18 de noviembre de 2008

alberto.morales@eluniversal.com.mx

El historiador y ensayista Enrique Krauze afirma que México enfrenta graves problemas: una creciente criminalidad, la guerra contra el narcotráfico y la amenaza de que el crimen organizado llegue a las campañas electorales.

“Pero esta es la guerra que nos tocó por la creciente demanda de drogas (en el mundo) y porque el Estado mexicano, que hace décadas controlaba todo, (en la actualidad) es un Estado centrífugo en cuyos intersticios se ha colado el crimen”.

Considera que a dos años de la administración de Felipe Calderón, ha tenido un desempeño “responsable y discreto, mejor del que muchos esperaban”, donde no ha habido errores garrafales como con Vicente Fox.

Krauze, quien por más de cuatro décadas ha analizado la historia del país, expresa que no ve visos de ingobernabilidad.

Pero, en su opinión, resulta “increíble” que un problema de “eficiencia y de normas” haya cobrado la vida del secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, el “número dos” en el gobierno federal. “Le da a uno miedo, ¿en manos de quién estamos?”, reflexiona.

Enrique Krauze habla sobre su más reciente libro El poder y el delirio (Tusquets), un ensayo sobre Venezuela y su presidente Hugo Chávez, a quien considera un “venerador de héroes”.

¿Qué le llamó más la atención de Chávez?

Tiene la idea del gran hombre. Es un gran admirador de Simón Bolivar, de Ernesto El Che Guevara, de Fidel Castro, a quien llama padre. Pero en esa intoxicación hay siempre una voluntad de poder. La principal premisa del libro es que Chávez es ante todo un gran “hugólatra, ejerce la hugolatría”.

¿Qué representa Castro para Chávez?

Chávez quiere ser con respecto a Castro, lo que Stalin quiso ser con respecto a Lennin. Hay fotos de Stalin, con Lennin enfermo, tomando nota en una libreta. Es decir, Chávez está erigiéndose en el heredero de Castro.

Según las conversaciones que tuve con sus ministros, su idea de Estado está basada en un poder central, fuertísimo, concentrado en su persona, donde la inmensa mayoría del pueblo obedece de manera casi voluntaria sus dictados. ¡Eso se llama totalitarismo!

¿Qué o quién ayudó a Chávez a construir su delirio en el poder?

Chávez ha utilizado a los medios para hacer culto a su personalidad y para gobernar. ¡Aparece cada vez que se le ocurre en cadena nacional! Dedica seis horas todos los domingos para hablar de cualquier cosa. Es una especie de tele-evangelista, un showman.

Krauze considera que Venezuela regresó a la Europa de los años 30 en donde los fascistas o comunistas dividían el mundo entre nosotros los buenos y los otros, traidores o pitiyanquis, como les dice Chávez.

Es odio sembrado en las propias familias, es lo peor, el odio genera odio, nunca se ha visto que del odio salga el árbol de la libertad o de la concordia.

¿Barack Obama puede cambiar el escenario en Venezuela?

Estamos frente a una oportunidad histórica. Es claro que Obama cambiará su relación con América Latina, primero con Cuba. Ya declaró que cerrará la base militar en Guatánamo, podría modificar el envío de remesas a la isla.

Kruaze analiza que si Obama favorece el deshielo de las relaciones EU-Cuba, esto le cambiará la ecuación a Chávez.

No podrá hacer más bravatas contra quien es su principal comprador de petróleo. Una política más sensible de parte de Estados Unidos le quitaría armas ideológicas a Chávez.

¿Encontró paralelismos entre Chávez y algún político mexicano?

El político que más se le parecería —Andrés Manuel López Obrador— no tuvo que ver en la factura del libro. Me motivó el interés intrínseco en Venezuela debido a mi amistad entrañable con Alejandro Rossi, colaborador de Vuelta y amigo de Octavio Paz.

¿Qué lección debemos aprender de Venezuela?

Venezuela construyó por decenios una democracia sólida con alternancia en el poder, con libertades cívicas, con estado de derecho. Pero por la corrupción de sus políticos y la miopía de sus empresarios, la indiferencia de sus clases rectoras, esa democracia se perdió.

Krauze dice que le gustaría que este libro fuera leído en México como un manual de todo lo que no se debe hacer...