A ritmo de un negocio ilícito: Piratería a la carta

ALBERTO MORALES
El Universal
Domingo 15 de abril de 2007

Tan sencillo como dar un clic de mouse y seleccionar de una lista tu música preferida. Y lo mejor de esta "selección a la carta" es que es absolutamente gratis.

Los llamados cafés-internet se han convertido en una herramienta barata, de 12 a 25 pesos por hora en promedio, donde jóvenes, adultos y niños "navegan", bajan o descargan e intercambian archivos musicales en línea P2P (peer to peer ) -persona a persona-, actividad que ha cobrado un auge incalculable, aunque sea ilícita.

En México el intercambio, descarga, almacenamiento y venta de música en internet sin la autorización de intérpretes o productores es un acto ilegal, de acuerdo con la Ley de Derechos de Autor y Propiedad Intelectual.

Sin embargo, con la revolución tecnológica que han provocado los aparatos electrónicos como iPod, Palm y teléfonos celulares, y las llamadas "redes sociales": blogs, My Space y Podcast, el almacenar catálogos musicales de libre acceso se ha convertido en el modus vivendi de miles de personas.

Intercambio o piratería
"Lex" -nickname (apodo)-, trabaja como encargado de un cibercafé en la glorieta del metro Insurgentes. El estudiante de Contaduría labora desde hace cinco años en ese lugar, que luce abarrotado principalmente por jóvenes.

Hay 40 computadoras colocadas en cubículos de medio metro de ancho. Una zona V.I.P. donde "puedes estar más cómodo y no hay restricciones para los usuarios, es decir tienen libre acceso a cualquier sitio web", comenta.

"Aquí vienen muchos chavos de preparatoria con listas de canciones para que se las baje y queme. Yo no lo hago, porque sé que es ilegal, pero como prestador de un servicio no les puedo prohibir que lo hagan", expresa Lex.

Y abunda que para él, el intercambiar archivos musicales no es piratería, pues "ya compraste un disco, pagaste por los derechos de esa obra. Sólo la estás compartiendo, pero como eso representa grandes pérdidas para las disqueras. lo consideran piratería".

Raúl de la Garza, profesor de política informática de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explica: "un usuario cualquiera puede descargar en su computadora música original, con lo cual no rompe la ley.

"Lo que no está permitido es almacenarla para venderla o sacar provecho de la propiedad intelectual de los artistas o grupos", señala.

Comenta que ante la falta de una legislación adecuada que castigue los llamados "delitos informáticos", como la descarga ilegal de música en internet, las autoridades judiciales sólo penalizan la violación a Ley Federal de los Derechos de Autor y la Ley Federal de la Propiedad Industrial.

Según las estadísticas, los cafés-internet son los sitios idóneos para bajar (copiar) música por parte del usuario, los dueños y los encargados.

La Asociación Mexicana de Internet que elaboró el estudio "Hábitos de los usuarios de Internet en México 2006", donde señala que hay 20.2 millones de internautas mayores a 6 años a nivel nacional.

De acuerdo con una medición que llevó a cabo en 28 ciudades del país, 48% de los cibernautas descargan música cuando se conectan a internet.

-¿Cómo se puede prevenir este delito? -se le preguntó al académico de la UNAM.

-La principal arma es la educación, el juicio, supervisión, el conocimiento y la comunicación en la que deben sustentar la relación de los padres hacia sus hijos, pues son delitos latentes que el desconocerlos no los exenta del delito al estar bajando, almacenando y distribuyendo entre los amigos, porque, repito, es un delito grave y que es castigado con la cárcel -responde Raúl de la Garza.

Pero Israel David Sánchez, estudiante de Arquitectura de la UNAM, empleado de un cibercafé en Ciudad Universitaria, tiene una opinión diferente:

-¡Es un absurdo! ¡Cómo podemos comprar un disco original si tenemos que ganar por lo menos tres salarios mínimos! Además las grandes disqueras no pierden, como dicen; si fuera así, ¿por qué no han detenido la piratería?

Con él, coincide Lucia Angélica Aguirre, quien también trabaja en un café-internet de la zona.

"Sí es más barato, pero seamos sinceros: la industria discográfica gana enormes cantidades de dinero. ¿Por qué no pone los CD más baratos? Esos precios no están hechos para la economía de nuestro país y el gobierno no hace nada para satisfacer nuestras necesidades sociales", considera.

La revolución digital
En los blogs, Myspace y Podcast -páginas personales donde se alojan archivos de texto, imágenes, archivos musicales, videos- los usuarios han dispuesto listas de descargas de canciones totalmente gratis y de libre acceso.

Cualquier persona, en cualquier parte del mundo, puede suscribirse o bajar contenido en audio a través de estas páginas.

Según la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI, por sus siglas en inglés) hasta el año pasado KaZaA era el sitio internacional más grande de piratería de música en el mundo, hasta que una Corte federal de Australia la obligó a cancelar el libre intercambio de archivos.

Otros operadores que gozan de gran popularidad entre los intenautas asiduos al peer to peer son: Limewire y BitTorrent, sin embargo, de acuerdo con los usuarios, estos sitios contienen gran cantidad de spyware, programas espía que recopilan información sin el consentimiento de los usuarios.


QUÉ DICE LA LEY
La Ley Federal de los Derechos de Autor en su apartado del reglamento hace referencia que:
Artículo 424 bis.

-Se impondrá prisión de tres a diez años y de dos mil a veinte mil días de multa:
I. A quien produzca, reproduzca, introduzca al país, almacene, transporte, distribuya, venda o arriende copias de obras, fonogramas, videogramas o libros, protegidos por la Ley Federal del Derecho de Autor, en forma dolosa, con fin de especulación comercial y sin la autorización que deba otorgar el titular de los derechos de autor o de los derechos conexos.

II. A quien fabrique con fin de lucro un dispositivo o sistema cuya finalidad sea desactivar los dispositivos electrónicos de protección de un programa de computación.